Ariadna Voulgaris
“Hasta la vista, baby”, parece expresar la mano de Terminator al despedirse de John Connor antes de autodestruirse |
¿Ustedes cómo se despiden? ¿Dicen adiós o hasta luego? ¿Dicen hasta
luego o chao?
Miles de personas en todo el mundo de
habla española temen despedirse diciendo adiós
porque creen que eso hará que sea la última vez que vean a su interlocutor. Yo
me pregunto si esta palabra será así de mágica o si es superstición o prurito
de la gente.
Cierto que uno siente que puede faltar
menos tiempo para volver a verse cuando utiliza hasta luego, hasta la vista
y otras. Adiós, de verdad, tiene un
halo más definitivo, pero, por su origen, puede ser lo mejor que nos lleguemos
a decir cuando nos despedimos. Mi diccionario de etimología dice que adiós proviene de la expresión a Dios te encomiendo, a Dios encomiendo tu alma (o tu vida, tu destino).
No es extraño que se hiciera toda
aquella prosopopeya en la antigüedad, cuando las comunicaciones de larga
distancia eran casi inexistentes y al irse uno de viaje, no había manera, que
no fuera la fe, de imaginar siquiera cuándo volveríamos a ver a la familia y a
los amigos. Ni ellos a uno.
También solía usarse, como lo ha hecho hace
poquito Joaquín Sabina, con Dios, que
es algo así como apócope de con Dios te
dejo, con Dios vayas, con Dios quedes. Tiene que haber sido,
digo yo sin pretensiones de tener la razón, la mayor posibilidad (o a lo menos
la expectativa) de volverse a ver, que debe haber venido con la Revolución
Industrial, o paulatinamente después de ella, que se empezó a sentir que era
mejor usar esas otras variantes, como el curioso chao o el refinado buenas
tardes.
Veamos algunas de las despedidas más
frecuentes:
Hasta luego. Es como informal, cercano,
amistoso. No hace falta ser muy adulto ni muy joven para usarlo
Buenos días, tardes, noches. Es quizá lo más formal
que pueda emplearse para despedirse en el trabajo, en oficinas del Estado, en
el lugar donde uno estudia. Sin embargo, es tan común que uno suele utilizarlo
cuando, en la noche, se va a dormir y deja a la familia, o parte de ella,
instalada frente al televisor.
Chao. Todo el mundo les va a decir que nos lo
han regalado los italianos. Sin embargo, como en italiano se utiliza también
para saludarse al encontrarse, yo que ustedes investigaría más esta etimología.
Nos vemos. Quizá sea el que indica la
mayor expectativa de reencontrarse pronto. Nos
vemos más tarde, pronto, después.
Hasta la vista. Igual que el anterior, pero
en este caso se siente que, por más que se crea que será pronto, no se sabe cuándo
volveremos a vernos. ¿Se acuerdan del robot personificado por Arnold
Schwarzenegger en Terminator, a quien
John Connor enseña a decir: “Hasta la vista, baby”?
OK.
Aunque no siempre se escribe así porque es una imitación del inglés, es la
despedida más informal que puede pensarse, porque, como ya saben, es
equivalente a ‘estamos de acuerdo’.
Dale. No lo usen. Es que no tiene mucho
sentido. Parece provenir del vocabulario hamponil.
Ya está bien. Aunque despedirse a veces
es difícil y aunque entre nos no sea verdad, como dice Sabina, “para decir con Dios, a [nosotros] nos sobran los motivos”.
ariadnavoulgaris@gmail.com
Año V / N° CXLII
/ 6 de marzo del 2017
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